Caso de estudio

Oro problemático procedente de Perú

Perú es el mayor productor de oro de Sudamérica. Mientras que en el norte se desarrolla principalmente la minería industrial, al sudeste de la Amazonia florece la pequeña minería.

Foto: Daniel Schweizer

Minería de oro en la región de Madre de Dios © Daniel Schweizer Minería de oro en la región de Madre de Dios © Daniel Schweizer

Las regiones afectadas por la fiebre del oro se han convertido en un El Dorado sin ley con grandes problemas sociales, violencia, criminalidad y miseria. Por ello, la APA se esfuerza particularmente en que el oro sucio procedente de aquellas regiones no llegue a Suiza y apoya las iniciativas que mejoran la situación en las zonas donde se practica la minería de oro.

Oro problemático procedente de la región de Madre de Dios

Desde 2015, la APA realizó durante varios años visitas a la región de Madre de Dios, donde viven numerosos pueblos indígenas. La expansión de la minería de oro en la región ha provocado violaciones de los derechos humanos y la destrucción del medioambiente. Por un lado, las comunidades indígenas son víctimas de asaltos, prostitución, robo de tierras y derechos ambiguos sobre su uso, así como de problemas de salud por la alta contaminación de los ríos y la deforestación de la selva tropical a causa de las actividades mineras. Por otro lado, dentro de las comunidades surgen graves conflictos entre los buscadores de oro que tratan de asegurar su subsistencia y las personas que se oponen a la destrucción progresiva del medio ambiente. En sus informes, la APA expuso que el oro problemático había llegado también a Suiza.

Conexión con Suiza

En un informe del año 2015, la APA reveló que Suiza, entre otros países, estaba recibiendo oro proveniente de la pequeña minería irregular e ilegal de Perú. Ya en enero de 2014, la aduana peruana había realizado un decomiso que incluía oro destinado a la refinería suiza Metalor. Un informe publicado en marzo de 2018 por la APA sugeró que la refinería Metalor de Neuchâtel muy probablemente seguía recibiendo oro de origen peruano producto de la minería ilegal y del tráfico, relacionado con la evasión de impuestos y la destrucción del medio ambiente. Ese oro provenía de la empresa exportadora Minerales del Sur, que abastecía en exclusiva a la refinería suiza y era el principal proveedor de oro peruano.

Pocos días después de la publicación del informe, los medios de comunicación peruanos La República y Ojo Público informaron de que las autoridades aduaneras y fiscales de Perú habían incautado 92 kg de oro de origen presuntamente sospechoso. Esta fue la mayor incautación de oro desde que las autoridades reforzaron a finales de 2013 la lucha contra la extracción ilegal de oro. Posteriormente, la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (SUNAT) y el Ministerio Público de Perú investigaron a Minerales del Sur por sospecha de evasión fiscal y tráfico ilegal de oro.

Incluso después de la incautación del oro procedente de Perú, Metalor declaró en un primer momento que no cambiaría su política de compras en Perú. Hubo que esperar hasta el verano de 2019 para que la refinería anunciara el cese de la compra de oro proveniente de la minería artesanal y de pequeña escala (MAPE) de Perú después de que las investigaciones contra Minerales del Sur se ampliaran incluso a presunto delito como organización criminal. Después, en julio de 2020, Metalor reanudó las actividades comerciales de MAPE en Perú. Con la intermediación de Minera Yanaquihua S.A.C., empresa del departamento de Arequipa en el altiplano peruano, Metalor compró al año aproximadamente 500 kilogramos de oro proveniente de la MAPE.

Desde 2019, Yanaquihua S.A.C. cuenta con el respaldo de la „Better Gold Initiative for Artisanal and Small-scale Mining“, la filial peruana de la Swiss Better Gold Association, que hace un seguimiento de los mineros sobre el terreno y vigila que se respeten las normas. Yanaquihua S.A.C. cuenta además con la certificación Responsible Jewellery Council Chain of Custody y recibe desde 2010 el apoyo de la ONG Solidaridad en lo referente a los procesos de formalización y a cuestiones de salud y medioambiente.

Se necesita transparencia y la obligación de debida diligencia

En principio, la APA ve con buenos ojos la decisión de Metalor de reiniciar las actividades comerciales de MAPE en asociación con Minera Yanaquihua S.A.C. En mayo de 2023, un incendio les costó la vida a 27 mineros precisamente en esa mina. Se plantea entonces la cuestión de en qué medida ha fallado la debida diligencia de Metalor. Asimismo, surge la pregunta sobre la responsabilidad de la mina Yanaquihua, las autoridades peruanas, el Responsible Jewellery Council, la Swiss Better Gold Initiative o la empresa de inspección SGS, en vista de que incluso con tantos actores involucrados se puede producir un accidente tan desolador. Este caso demuestra además que los esfuerzos voluntarios no son suficientes para garantizar una producción de oro respetuosa del medio ambiente, socialmente justa y segura en un sector tan complejo y arriesgado como el de la minería a pequeña escala.

Para que el comercio de oro, en particular del oro procedente de la pequeña minería, sea medioambientalmente y socialmente responsable, su origen debe ser transparente y hay que implementar una obligación de debida diligencia para las empresas.

Oro problemático procedente de la región de Cajamarca

Desde el año 2012, la APA ha investigado la situación de los derechos humanos en la provincia norteña peruana de Cajamarca, donde la empresa Minera Yanacocha S.R.L opera en el altiplano la mina de oro más grande de Sudamérica. En 2012, las protestas en contra de Conga, la nueva mina de Minera Yanacocha, les costaron la vida a cinco manifestantes. Yanacocha ayudó a financiar las operaciones de la policía nacional, que actuó con exceso de rigor contra la población. En 2016, la APA publicó un informe sobre los derechos humanos en Yanacocha. La APA, junto con otras organizaciones, apoyó a la pequeña agricultora Máxima Acuña de Chaupe en su disputa legal contra Yanacocha. El litigio giraba en torno a un terreno sobre el que reivindicaban el derecho de propiedad tanto la familia Acuña de Chaupe como la empresa minera.

Protesta pacífica de comuneros en la región de Cajamarca contra el proyecto aurífero Conga.

Protesta pacífica de comuneros en la región de Cajamarca contra el proyecto aurífero Conga. Foto: Frente de Defensa Ambiental de Cajamarca (FDAC)

Para Yanacocha este terreno tenía una importancia estratégica, ya que estaba ubicado en medio de una zona donde está previsto construir una nueva mina. Debido a las masivas protestas de la población local y de diferentes organizaciones no gubernamentales, el proyecto se suspendió, lo que supuso un éxito para Máxima Acuña de Chaupe y las organizaciones que la apoyaban. Sin embargo, el conflicto por los derechos de propiedad sobre las tierras continuó. En este contexto, la familia de Máxima Acuña de Chaupe fue víctima de constantes acosos y agresiones tanto por parte de empleados de Yanacocha S.R.L. como de la policía nacional. En varias ocasiones se destruyó la vivienda y los campos de la familia y también se mataron animales. Durante la disputa legal, la agricultora Máxima Acuña de Chaupe se hizo famosa en todo el mundo, recibió el premio Goldman por su compromiso medioambiental y, en mayo de 2017, fue absuelta por la Corte Suprema de Perú de las acusaciones de la empresa aurífera Yanacocha S.R.L. por robo de tierras.

La mayoría del oro de Yanachocha S.R.L. también logra llegar a Suiza. Entre los clientes del oro extraído por Yanacocha se encontraba igualmente la refinería suiza Valcambi S.A., sobre todo en época de grandes conflictos. Esta refinería procesó alrededor de 70 % del oro de Yanacocha. Actualmente, la refinería Argor Heraeus es la que procesa este metal precioso. A diferencia de lo que ocurre con la mayoría de los productores de oro, en este caso se sabe quién lo compra. Lo que se necesita ahora es una transparencia generalizada sobre el origen del oro, así como una obligación de debida diligencia legalmente vinculante para las empresas, a fin de que el oro de alto riesgo no llegue nunca más a Suiza.

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